viernes, 16 de noviembre de 2012

Cartas sobre la mesa

Por fin se acabaron las clases, y aunque fueron contadas con los dedos de una mano las veces que asistí regularmente la sola idea de tener que rendir pruebas es algo que mantiene la preocupación a flor de piel. Hoy puedo decir que ese periodo ya finalizó por el momento. Quedan los exámenes finales y me siento totalmente orgullosa de mi desempeño contrario a los comentarios que aparecen.

Todo se puede, todo lo que se quiere se logra sin importar el esfuerzo o tiempo que requiera.

Pasando a otro tema, anoche tuve un sueño encantador y desperté inspirada, tomé el cuaderno que mantengo en la mesita de noche y comencé a escribir.

"Soñé contigo, con nosotras, con ellos y aquellos, con los tuyos y los nuestros, los que están, los que llegarán y los que ya se fueron.
Soñé con un pasado y con el futuro. El presente lo dejé entre las sábanas porque no valía la pena perder el tiempo soñando con algo, siendo que podía tenerlo contigo. Esa es mi misión, tenerte y dejarme tener.

Estabas ahí, como siempre estuviste; como siempre debiste estarlo. Es increíble mirarte dormir y sentir que quiero que siempre estés y más aún que al abrir los ojos me confirmes que así será. Saber que el tiempo se desliza lentamente entre las cortinas para dejarme ver cómo amanece. Un nuevo día, una nueva vida, un nuevo comenzar. Saber que puedo re-encantarte hoy más que ayer, que quiero/necesito ver a diario que tu deseo por mi es igual de intenso que la primera vez que fantasee con tocarte y sentirte más cerca de lo que se puede estar; que puedo enamorarte un poco más sin necesidad de bajarte la luna ni regalarte una estrella, pero con el compromiso de contarte un cuento hasta que te acurruques a mi lado, me abraces fuertemente y entre susurros me digas 'te amo' para luego sucumbir.

Tenemos un mundo, el nuestro."

El amor dura 27 planos, rompamos eso y nunca me dejes de abrazar.

lunes, 12 de noviembre de 2012

Han sido días un poco estresantes y también un poco duros. El año se está acabando y con él hay que finiquitar todo lo que queda pendiente, así que en eso por lo menos está todo, esperando los resultados de los esfuerzos realizados dentro del año escolar (?) y con todo en general es lo mismo. 

Espero que todo salga bien y tener las herramientas para llevar a cabo los proyectos que tengo en mente. 

Sé que es nada lo que estoy poniendo acá, pero ayuda harto a combatir la incertidumbre de este momento (espero unos documentos para un trabajo y la ansiedad me está comiendo). ¡Crucemos los dedos!



A ti que no lees esto: Te amo. (punto) 

viernes, 9 de noviembre de 2012

Creo que a partir de este momento, este lugarcito será olvidado o al menos un tanto abandonado. ¡Ahora eres mío!

A pesar de todo esto sigue siendo complicado al menos así lo veo y lo percibo, más bien... lo siento.

Cariño:

Sé que no leerás esto y es por eso mismo que puedo escribir con más libertad.
Tenía toda la esperanza de poder estar juntitas en un tiempo más, pero las cosas no se dieron así. No tienes idea lo mucho que te echo de menos y todo lo que me haces y me harás falta.
Acepto que tengo mucho miedo en este momento y sobre todo porque cuando algo se termina deja muchas cosas inconclusas, no me gustaría que más adelante me pueda dar cuenta de que cometimos muchos errores y ya sea tarde.

Sigo manteniendo la firme convicción de que todo iba a resultar, quizás en un tiempo más, o quizás no.

Eso por ahora.
Seguiré informando conforme pasen los días.


jueves, 8 de noviembre de 2012

Ya van varias noches que no puedo conciliar el sueño como es debido y creo que hay algo que me está atormentando incansablemente, así que busqué este pequeño espacio para mi.

Es complicado el punto en el que se transgreden los sueños; según yo la hora de dormir o ese período en el que cerramos los ojos y simplemente nos entregamos a lo que nuestro subconsciente quiera hacernos ver o experimentar es sagrado. Nada ni nadie tiene derecho ni voluntad suficiente como para involucrarse en ello y violentarlo. Es todo entretenido en la medida en que los sueños son incoherencias, recuerdos del día a día o quizás de hace algunos años: tus amigos, tus papás, antiguos amores, desamores, incluso a veces episodios inconclusos con el final distinto que hubiésemos querido vivir. Pero ¿Qué pasa cuando esos recuerdos son dolorosos? Cuando en lugar de ser "recuerdos" son malas pasadas del inconsciente, son cosas que habíamos olvidado, que en algún momento borramos del historial de sucesos e inevitablemente lo enterramos en las más profundas lagunas de la memoria.

Ya ni siquiera sé si quiero dormir, el temor de recordar más cosas de las que no me acordaba o no quería recordar me da un poco de miedo. He llegado a pensar que es todo parte de un sueño bien hecho, pero hay evidencias demasiado contundentes, no hay nombres ni fotos, pero hay otras cosas que quizás explican mucho de lo que no entendía.

Todo se ha vuelto un poco confuso, espero confiada en que esto se solucionará de la mejor manera. Después de todo ya nada se puede hacer al respecto...

¡Buena noche!